El hueso decorado de Torre
Entre los huesos decorados descubiertos en yacimientos prehistóricos guipuzcoanos destaca el hallado en la cueva de Torre, en Oiartzun. Se trata de un cúbito de alcatraz del que se conserva un fragmento de 18 cm de longitud. Lleva grabadas las siguientes figuras: un ciervo, un caballo, un sarrio, dos cabras monteses, un uro y un antropomorfo. Hay además una serie de signos como líneas, trazos en zig-zag y puntos, que recorren el hueso de un extremo al otro. Las figuras animales son de gran realismo. Se trata de una extraordinaria obra maestre del arte mueble paleolítico europeo. Su cronología se remonta a 12.000 años de antigüedad (Magdaleniense Superior-Final)